UPA Madrid ha acusado a quien haya redactado esta normativa de tener «un total desconocimiento» de las labores que se realizan en el campo.
La organización agraria UPA Madrid se reunió la semana pasada con responsables técnicos de Protección Ciudadana para pedir aclaraciones sobre las numerosas dudas en la aplicación del Decreto 58/2009.
Hace quince años se puso en marcha el Plan de Protección Civil contra incendios forestales y «nunca habían surgido grandes problemas en las zonas cerealistas», según apuntó el responsable técnico de Protección Ciudadana.
El pasado viernes se publicó una resolución por la que se concede una autorización genérica, solo para este año, para el empleo de maquinaria agrícola en terrenos cercanos a zonas forestales. Esta autorización está ligada al cumplimiento de una serie de requisitos que suponen un incremento de los costes, lo cual pone aún más al límite la supervivencia del sector madrileño.
«Es evidente que esta normativa no la ha redactado alguien que conozca cómo funciona la agricultura», ha lamentado el Secretario General de UPA Madrid, Jesús Anchuelo. «Los agricultores y ganaderos somos los principales cuidadores del medio ambiente y los menos interesados en que se quemen nuestras parcelas. Solo pedimos que se nos tenga en cuenta para regular aspectos que nos afectan directamente», ha declarado.
La organización ha demandado una reunión urgente a los consejeros de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio y de Presidencia para «encauzar la situación ya que de no ser así el sector agrario madrileño saldría muy perjudicado».