Luis González Santiuste (Cabrero) – Prádena del Rincón Abril 2017
La Comunidad de Madrid, dicen la primera de España, dicen la que mejor hace los deberes, dicen, dicen, dicen…..decimos otros que esto es Castilla, la vieja o la nueva, La Mancha o León, pero CASTILLA, recia y noble, agrícola y ganadera y este invento nuevo que llamamos Comunidad Autónoma Madrileña, no es una excepción.
Soy ganadero, tengo un pequeño rebaño de cabras para carne, crio cabritos lechales para que vosotros los podáis consumir cuando os parezca oportuno, crio una raza autóctona española, en peligro de extinción, Blanca Celtibérica, pero eso en Madrid a unos escasos noventa kilómetros de mi explotación no parece importarle a nadie.
Tal vez alguno os estéis sorprendiendo, espero que pocos, en Madrid, a escasos kms. de vuestras casas, se cría ganado, se labran los campos y se elaboran productos de altísima calidad que humildemente ponemos en vuestras mesas, esta actividad ancestral permite además, mantener los campos limpios y transitables, posibilita que ciudadanos madrileños como vosotros sobrevivan en este entorno y lo mantengan utilizable para cuando vosotros decidís visitarnos los fines de semana.
Vivo en un pequeño pueblo de la Sierra del Rincón del que estoy enamorado, Prádena del Rincón, escasamente 150 vecinos, Reserva de la Biosfera por decisión de la UNESCO hace ya algunos años, aquí nació mi padre y también lo hizo mi abuelo, agricultores y ganaderos, un poco más abajo Berzosa del Lozoya, donde llego mi madre con diez añitos, mis abuelos y resto de la familia materna ovejas incluidas, procedentes de Pedraza de donde son originarios, pastores, por supuesto.
No soy ninguna excepción, miro a mi alrededor y veo lo mismo, personas que se aferran a su modo de vida, a su tierra, a su cultura y lo hacen a pesar de todo, nuestras costumbres, nuestros usos, nuestra economía de subsistencia, nuestra simbiosis con el territorio, el tradicional abandono al que hemos estado sometidos y en gran medida seguimos estando, permite que vengas los fines de semana y disfrutes de lo que te venden, «entorno natural» «naturaleza virgen» etc. , mentira, todo lo que ves y lo que te pierdes, es sin duda precioso, pero es el resultado del trabajo incansable de nuestros mayores, no hay un metro cuadrado en toda la sierra que no esté regado con el sudor y la sangre de nuestra gente y paradójicamente los usos y costumbres que han producido lo que ves, ahora están prohibidos en su mayoría en aras a conservar el entorno.
El «homo serranus autoctonus» es la verdadera especie en peligro de extinción, si además eres ganadero con mayor motivo, ¿Por qué no nos incluyen en el catalogo de especies protegidas? Podemos vestirnos con las ropas del abuelo para que nos hagáis fotografías los fines de semana……en serio, ¿Por qué no nos dejan en paz? Cuando compras un cabrito, un cordero unas chuletas de ternera o de cerdo y te cobran un dineral, ¿te preguntas que parte de ese dinero le llega al productor? Peor aún, ¿sabes realmente de donde es esa carne que te venden como de aquí? Si lo hicieras, tal vez empezarías a pensar que los franceses tienen algo de razón cuando queman camiones españoles, lo realmente curioso es que a nosotros, a vosotros, nos estén permanentemente invadiendo con productos de consumo de cualquier parte del mundo, con vete tú a saber que controles sanitarios, de esos con lo que a nosotros nos asfixian, todos lo sepamos y estemos tan tranquilos.
Para los ganaderos madrileños, la última vuelta de tuerca, ha sido la reciente aparición del lobo en nuestros municipios por la merma en la producción que supone, el cambio en los manejos que obliga, los mayores costes de producción a los que nos vemos condenados y lo peor de todo, la desastrosa gestión medioambiental de la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, con su Consejero Sr. Taboada, a la cabeza, volviendo al principio, ¿Por qué un político puede mentir permanentemente sin que pase absolutamente nada? Llevamos ya unos tres años conviviendo con este problema, ahora con este «equipo» de dirigentes y antes con otros, es lo mismo, notas de prensa, publicaciones en los medios, manifestaciones del sector, reuniones en la Consejería, da igual, cuando las circunstancias obligan salen al paso diciendo lo mismo y prometiendo lo de siempre una y otra vez, que los ganaderos cobran los daños, en mi caso y en mi entorno, no se ha cobrado un ataque desde Diciembre del año 2015, que si medidas preventivas, que si refugios en el monte para que los animales pernocten, que si declaración de zonas loberas y ayudas en consecuencia por la convivencia con el depredador y lo que esto supone, que si potenciar el uso de mastines ayudando a su manutención y legislando su uso especifico como animales de guarda y manejo, nada, nada y nada, por cierto, ¿sabias que con la legislación actual un mastín es como cualquier otro perro en Madrid, pesa por encima de los 45/50 Kg. y en consecuencia debería ir atado y con bozal? ¿Absurdo no? Pues así estamos.
¿Y los ganaderos son buenos, buenísimos y políticos y demás malos a rabiar? Pues creo sinceramente que no, la Unión de ganaderos de la Comunidad de Madrid UGAMA, denuncia constante e insistentemente la situación del campo madrileño, ¿donde están el resto de organizaciones agrarias, ASAJA, COAG, UPA, etc.? ¿solo ve problemas UGAMA? ¿Voluntades secuestradas? ¿Qué ayudas públicas reciben unos y otros? Todo esto y más, también depende de la misma Consejería, de la que ya no se cree nada ni el guardia de la puerta, el siguiente paso debe ser por tanto testar la opinión de la Presidenta Sra. Cifuentes, dado que la situación actual del campo en Madrid, dista mucho de lo que prometió en campaña electoral en el municipio de Buitrago del Lozoya de la mano entonces de la Sra. Ministra del ramo, Sra. Tejerina, en locales municipales graciosamente cedidos por el Sr. Alcalde que a la vez resulta ser el coordinador del Partido Popular en la Sierra Norte.
Y contra todo este cumulo de incumplimientos, despropósitos y sobre todo faltas de voluntades políticas, que agotan la paciencia de cualquiera y también la vía administrativa, cabe interponer recurso ante los tribunales de justicia, salas de lo contencioso administrativo en vía patrimonial, bla, bla bla. Se está haciendo y cabe suponer que cada vez se hará más, ya se verá que opinan los señores magistrados, de momento más gastos, papeleo, molestias, etc. nada que ver con el trabajo diario de una explotación agropecuaria y lo que resulta más indígnate y que de nuevo nos lleva al principio, «voluntades secuestradas» muchos ganaderos que no se deciden a iniciar la vía judicial, únicamente por miedo, si miedo, a empezar a sufrir represalias por parte de quien se debería dedicar justo a lo contrario, en forma de retirada de ayudas públicas, inspecciones a sus explotaciones y lindezas por el estilo.
El lobo, los costes de producción, el precio de los productos, la modernización del sector, el relevo generacional, etc., etc. son incontables los problemas, pocas las soluciones y lo que es peor, nulas las voluntades por parte de quien tiene en su mano que esto, al menos, inicie un camino diferente, entonces……….¿por qué continuamos votando de manera mayoritaria al Partido Popular en nuestro pueblos cada cuatro años?, ¿Somos tontos? tal vez otros no lo hagan mejor, que ya es difícil, pero al menos deberíamos permitírselo, al fin y a la postre dicen que la democracia es alternancia, puede que seamos nosotros los culpables, con nuestra incompetencia en el ejercicio del voto, tal vez no hayamos sido capaces de transmitir a nuestros políticos la idea de que su permanencia en el poder depende de su buena gestión, no de medrar por los despachos para que les coloquen en las listas o les den alguna dirección general, gerencia o lo que sea.
La próxima vez que nos visites, tal vez, solo tal vez, nos veas de otra manera, cuando pasees por nuestros campos, tal vez, solo tal vez, lo mires de otra forma, cuando contemples embelesado nuestro animales, tal vez, solo tal vez, comprendas que de su presencia depende que puedas pasear sin un machete para abrirte paso y también que suponen el medio de vida de muchas familias, que pagan impuestos como tú, que tienen hipotecas, que ansían un futuro para sus hijos, seguramente como tú y que les gustaría poder conseguirlo sin necesidad de abandonar la tierra de sus padres, a la que se sienten profundamente unidos, solo pedimos que esto dependa de nuestro buen o mal hacer, no de lo que decidan otros basándose en cuestiones e intereses que seguramente nada tendrán que ver con nosotros.