No hace muchos días, intenté tocar papeles municipales de mi pueblo y ¡dónde mejor que en el Ayuntamiento¡ quería saber por ejemplo quiénes habían sido alcaldes en los últimos 50 años y quien estaba cuando se hizo el ayuntamiento, o la piscina municipal, o la fuente de los 3 caños, quién metió el agua a las casas, quien trajo el teléfono a Montejo… muchas veces he bebido de las fuentes de ese gran historiador que se llamó Matías Fernández, que escudriñó legajos, removió archivos, y él dio respuesta a muchas de mis preguntas inquietas.
Corría junio de 1912 cuando D. Esteban Cristóbal Frutos entonces alcalde, leyó una carta a sus concejales remitida por el diputado provincial D. Arturo Soria, en la que anuncia que ha hecho una proposición a la Diputación Provincial pidiendo una red telefónica para que se pudiera comunicar con todos los pueblos de la provincia. El Ayuntamiento debería poner el local y los postes en el lugar correspondiente; todos ven con agrado la proposición y se ponen en marcha las gestiones para el permiso de las fincas y colocación de las torres; así se redactó la carta pero nunca hubo contestación.
Diez años más tarde en febrero, el alcalde D. Juan Martin Hernán creyendo en la buena voluntad volvió a reclamar aquella promesa hecha a si que en 1924 D. Santiago Hernán siguiente alcalde, decidió escribir contando lo necesario que era tener teléfono aquí, pues el más cercano estaba a 12 km.; así lo pide al Excmo. Sr. Director General de Comunicaciones asegurando que el pueblo pone los postes a pie de hoyo, tres imanes, timbres, sitio para la cabina, pilas y pago de abono telefónico. Desconocemos la respuesta porque no la hubo (por lo menos por teléfono).
En 1932 siendo ya alcalde D. Eustasio Jaén López se vuelve a pedir y se vuelve a denegar por no tener el pueblo 1000 habitantes asique se decide contar con Prádena y Horcajuelo para llegar a ese número pero tampoco tuvieron respuesta afirmativa.
Mediados del 1936, empieza la guerra, llegan los militares y traen un teléfono que usan las fuerzas que, alargándole con un ramal hasta el cerro de las cabezas donde está la avanzadilla cerca de la Ermita de Nazaret consiguen hacer funcionar. Finalizada esta 3 años después y marchando los militares, se llevan también el aparato.
Ya en 1940 con D. León de la Iglesia Ruiz, el ayuntamiento ofrece 7.000 pesetas para gastos de instalación; esta solicitud se volvió a repetir en 1943 y 1946 sin éxito.
Es en 1949 siendo alcalde D. Eladio Pérez Sanz, cuando la Compañía aceptó la petición con estas condiciones: casa para instalación, una persona con vivienda, 77.800 pesetas y 640 kl de cobre electrolítico de 2 mm. Se aceptaron estas condiciones y el dinero lo prestó un lanero llamado Cirilo Manada vecino de Riaza.
La centralita fue inaugurada el día 15 de mayo de 1950 en las antiguas escuelas de la calle del Pozo con la presencia del Sr. Gobernador de la provincia que entregó al ayuntamiento la cantidad de 107.031 pesetas para gastos de instalación y estuvo atendida siempre por la señora Dña. Victoria Palomino González.
A partir de ese momento la demanda de teléfonos particulares se disparó y se colocó una cabina en la plaza del pueblo junto a la iglesia que ha durado hasta el 2016 cuando ha sido quitada definitivamente.
Actualmente hay en el pueblo 103 teléfonos fijos y seguro que algún móvil…

Rafael de Frutos Brun.
Montejo de la Sierra 8-2-2017