El jueves 17 de septiembre se celebraba el primer pleno ordinario en Alameda desde la constitución del ayuntamiento en junio, que no pudo celebrarse por falta de quórum. Los cuatro concejales del Partido Popular no asistieron, tres de ellos mandaron un escrito para justificar su ausencia. Se convocó un nuevo para el sábado 19 a las cinco de la tarde. El pleno iba a servir para presentar al nuevo secretario municipal, que compaginará este puesto, con la secretaria de Rascafría. Además, era un pleno clave para configurar la organización del ayuntamiento, ya que es competencia del pleno el nombramiento de puestos como el tesorero, o de la comisión que deberá aprobar las cuentas municipales.

Esto último es necesario para poder mandarlo al Tribunal de Cuentas para su fiscalización. Se da la circunstancia que son las cuentas de la gestión de los ahora concejales del PP en la oposición. Si no se mandan, el ayuntamiento podría ver como el dinero que recibe del gobierno de la nación y de la Comunidad de Madrid, podrían ser retenidos.
El ayuntamiento ya está funcionando pagando a los trabajadores (tras varios meses sin cobrar), pedir subvenciones, o dar licencias.
Si los concejales del PP, siguen sin permitir, con su ausencia la constitución de la organización, el secretario explicó que había vías para que el ayuntamiento no quedara paralizado.
La inexplicable renuncia de los concejales del PP (cuatro sobre cinco) permitió la elección de la única concejala del PSOE, Noemí Frías, como nuevo alcaldesa. A los pocos días, la nueva alcaldesa ceso a la secretaria al intentar este convocar un pleno sin autorización. Desde entonces la situación del ayuntamiento se vio paralizada tanto por la falta de secretario municipal, como por la poca colaboración de los concejales del Partido Popular.
Una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid en julio confirmaba a Noemí Frías como alcaldesa, y sentenciaba que los concejales del Partido Popular al haber renunciado a la alcaldía el día de la constitución del ayuntamiento tras las elecciones de mayo, no podían optar a la alcaldía ni presentar una moción de censura.