Se han invertido 38.500 euros en el aislamiento interior, la instalación de una nueva red de calefacción y agua caliente, así como en mejoras en la iluminación y renovación del mobiliario 

La Comunidad de Madrid ha reabierto el refugio juvenil del Puerto de la Morcuera, ubicado en el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, tras haber finalizado las obras de rehabilitación, acondicionamiento y mejora de la eficiencia energética de las instalaciones, en las que se han invertido 38.500 euros.

Los trabajos han servido para aislar el interior de los muros, instalar una nueva red de calefacción y agua caliente sanitaria de todo el edificio y renovar la grifería de los baños de las dos plantas. En la cocina se ha colocado un frigorífico de gas, se han adquirido dispositivos de iluminación led para todas las estancias con el objetivo de mejorar la eficiencia energética y se ha renovado el mobiliario.

La instalación está situada en el término municipal de Rascafría, en el mismo Puerto de la Morcuera, un punto con vistas panorámicas extraordinarias del Valle del Lozoya y Cuerda Larga. Esta localización propicia la realización de rutas de senderismo, ciclismo y todo tipo de actividades de montaña, y su riqueza y variedad de recursos naturales han sido determinantes para incorporarlo al Programa de Educación Ambiental que la Comunidad de Madrid dirige al profesorado y alumnado de la región.

Este refugio juvenil dispone de 42 plazas, distribuidas en 3 habitaciones de uso compartido con literas, dos baños con duchas y un aseo. Cuenta con una sala de actividades y reuniones, un salón comedor con chimenea y una cocina básica para calentar alimentos.

El edificio, antigua casa de peones camineros, fue rehabilitado en su día para su utilización como refugio y es uno de los tres de los que dispone la Dirección General de Juventud para prácticas educativas, formativas, deportivas, medioambientales y de ocio, junto a los de Soto del Real y Villamanrique de Tajo.

Aunque están dirigidos para un público juvenil, no hay límite de edad para la utilización de estos recursos. Antes de la pandemia, el refugio de la Morcuera recibía cada año unos 1.400 visitantes.