Agosto se despidió en Pinilla del Valle con la celebración de la XVI Feria de los Oficios. El centro del pueblo tuvo un gran ambiente, tras el parón de los dos últimos años. Los puestos de artesanos repartidos por las plazas de la Constitución y del Gobernador tuvieron un gran afluencia de públicos, que recorrían sus puestos observando y comprando los productos artesanos que tenían; desde los creadores del mismo Pinilla, a los venidos de Lozoya, Torrelaguna…

Además las mujeres de Pinilla firmaban a todo el que quisiera su libro Recetario Tradicional de Pinilla del Valle, elaborado por ellas. El dinero obtenido de su venta se destinará a mejoras del centro de mayores, aunque lo importante es el buen rato pasado, mientras lo elaboraban. Sus manos también confeccionaron los adornos que colgaban en las calles.

La feria se abrió con un pasacalles de Gigantes y Cabezudos, y la música concluyó con la ronda tradicional de Guitarras, Laudes y Violines de los Guitarreros de la Sierra.