El complejo que forman el Monasterio de El Paular y su hospedería afronta en julio el cambio. A mediados de ese mes finaliza la concesión que se hizo a congregación Benedictina y el uso de la hospedería como Hotel.
El conjunto arquitectónico pertenece a Patrimonio Nacional, que en 1954 cedió el uso a los Benedictinos. Desde entonces la actuación conjunta del Estado, y de la Comunidad de Madrid ha ido rehabilitando tanto la zona del claustro como la hospedería. La congregación Benedictina tiene asegurada su continuidad mediante un nuevo convenio.
El problema se sitúa en el hotel, donde la actual cadena hotelera que gestiona el edificio no continuara.
Los casi 50 trabajadores no saben todavía con seguridad cual es su destino. Existen varias grupos interesados según ha asegurado a Senda Norte, la alcaldesa Ana García Masedo.
El problema es que la nueva concesión que debe hacer Patrimonio Nacional, no contemplar la subrogación de trabajadores, ni el mantenimiento del número de trabajadores.
A menos de un mes, ante la incertidumbre de la situación los trabajadores han empezado a realizar movilizaciones, colocando pancartas en el pueblo.