El sábado 5 de octubre se presentó en el salón de plenos de Lozoya un libro. Algunos dirán un libro más. Y no, no es un libro más. “Rabo de Lagartija”, recuerdos de una vida es el libro de una vida, en concreto de Julia Carrasco, desde su pueblo natal, Perales de Tajuña hasta Lozoya, de aquellos primeros recuerdos con sus padres y hermanas, a su presente con sus hijos, nietos y bisnietos.

“Rabo de lagartija” no tiene momentos épicos, tiene algo mejor, muchos momentos de la vida de una persona que transitó por la posguerra con penurias y sufrimientos  y como, poco a poco fue llevando una vida con pasión, con curiosidad, con amor y como un muro para los suyos.

“Rabo de lagartija” tiene su origen en las historias, en las anécdotas, en las cosas que compartió Julia con sus nietos, en especial, Leyre Arnay Fernández que ha recopilado muchas de las cosas que le contaba su abuela en aquellas tardes de pan y chocolate. Ella animó a su abuela a poner por escrito todos aquellos recuerdos en un cuaderno.

Julia no pudo estudiar como hubiera querido ella y sus padres, desde niña tuvo que trabajar para ayudar a la familia; sus malos recuerdos de aquellas monjas que las llamaban despectivamente “las hijas del arroyo”; ya en aquellos años 50, ella tuvo que sufrir el acoso de un hombre que la quería como una posesión; pero también su amor, por quien aun después de muerto fue su marido, Félix Arnay, su llegada a Lozoya y….

Como en toda vida hay momentos buenos, y días duros. El amor, la emoción de sus hijos, nietos y convecinos se pudo ver en la presentación donde Julia, con su nieta Leyre asistió a la presentación que hicieron Carmen la Torre y José Luis Pérez.

Se puede comprar en la Casa del Libro en Madrid.