«Grullas por la PAZ» es una de las iniciativas creativas más interesantes, porque partiendo de la trágica historia de Sadako, crearon un proyecto que empezó a volar como un vuelo de ilusión a través de Reyes, Desirée y Belén.

¿Cómo surge el proyecto de las grullas?
En el otoño de 2015 visitamos la laguna de Gallocanta entre Teruel y Zaragoza para ver la llegada de las grullas desde el norte de Europa. Desirée pintaba y Belén hacía fotos. Entre atardeceres sonoros y amaneceres multitudinarios, recibimos una llamada telefónica desde el Centro de Educación Ambiental de El Cuadrón, en Madrid. Nos proponían hacer una exposición en sus instalaciones. Decidimos aceptar la invitación y como teníamos los ojos y el corazón lleno de grullas, éstas serían el tema de la muestra.
¿Qué os hizo unir fuerzas?
En el proceso de investigación descubrimos a Sadako, una niña japonesa que tenía 2 años cuando cayó la bomba atómica sobre la ciudad de Hiroshima… y así Reyes entró en escena para dar forma a esta conmovedora historia. Ya estábamos las cuatro; Sadako, Reyes, Desirée y Belén. Con esta cuadrilla reunida, comenzó una sinergia creativa imparable llena de generosidad y complicidad.
Sadako’s Creative Company, ¿qué significa?
Sadako’s Creative Company es un grupo de experimentación creativa que nació bajo las alas de esta exposición y desde entonces no ha dejado de volar en bando.
Nuestro compromiso: el activismo creativo, nuestra misión: encontrar belleza y devolverla, nuestra convicción: la pulsión creativa como detonante de cambio hacia un mundo mejor.
1.000 Grullas para la Paz surgió con una idea desde 2016 cuando la vimos en el CEA El Cuadrón, ¿esa idea ha cambiado o se ha enriquecido?
La idea primigenia de la exposición sigue siendo la misma, que es generar un espacio de conocimiento, un espacio de reflexión,?un espacio de creación, en definitiva, un espacio de LIBERTAD.
Lo que ha sucedido en estos tres años es que se ha ido enriqueciendo en cada uno de los 10 espacios donde ha migrado, haciéndonos explorar distintos lenguajes artísticos y expresivos.
Habéis recorrido muchos pueblos, pero tiene fin…
No tiene fin, la energía se transforma. 1.000 grullas para la Paz es el germen de este grupo de experimentación creativa. Además, 1.000 grullas para la Paz sigue migrando rumbo a Hiroshima con el Senbazuru, que es la esencia de cada una de las paradas migratorias que ha hecho.
¿Os queda algo por hacer?
Sadako’s Creative Company acaba de nacer y nos queda, esperamos, un largo camino por explorar.
¿Qué os ha aportado a vosotras la exposición y la relación con las personas?
A nosotras nos ha aportado, sobretodo, el experimentar la sinergia creativa que se ha producido al trabajar las tres juntas. También psicomotricidad manual y capacidad de improvisación.
Este proyecto ha crecido y ha tomado forma gracias a la generosidad y al apoyo incondicional de muchas personas.
Un deseo, un poema de despedida.

Tiempo de migraciones
Me subo a lomos de una grulla y las fronteras humanas desaparecen.
¿De dónde son las grullas?

?Las grullas son del aire,?

y es en el aire donde crean alianzas para vivir.
¿De dónde son los seres humanos?
Poema de la exposición 1.000 grullas para la PAZ