A Jose Luis del Pozo Alonso le conozco desde hace más de una década, siempre jugando a la calva, y hablando mucho y bien de su pueblo. Jose Luis nació en las Navas de Buitrago. Siempre está pensando en actividades que involucren a todo el pueblo.

¿Qué hace un jubilado?
Tras ir a a la mili (el servicio militar obligatorio) hizo un curso de telefonía, y estuve trabajando durante varios en Bilbao y otros puntos de España. Cuando me canse, me vine a Madrid a trabajar como taxista. 36 años en Madrid.
Ahora me dedicó a promover actividades en las Navas como la fiesta de la Matanza para que la gente recuerde como se preparaba para pasar todo el año.
Las Navas siempre ha sido un pueblo pequeño. Por desgracia no consiguió desarrollarse. Con apoyo del ayuntamiento se puede dar vida a estos pueblos.
¿Cuál es el problema?
El problema en la Sierra es que no sea ha creado nada, sólo se ha mirado la construcción, y hacer cuatro chalets. Y claro, los pueblos se han llenado de chalets y se han quedado sin gente. No se ha creado ninguna industria, así es casi imposible vivir.
¿Por que revivir la fiesta de la Matanza?
La Matanza era algo habitual en estos pueblos. Todas las familias tenían un cerdo o dos que le criaban, con los desperdicios, las patatas pequeñas, cosas que ahora se tiran. La matanza era con lo que vivía la gente todo el año: jamones, chorizos, costillas… Aquí no había carnicero.
Llegaba la epoca de la siega y sacaba el chorizo, el jamón y asi subsistían todo el año.
Yo era muy pequeño, ahora, durante la preparación las comidas que se hacían, me acuerdo la sangre con cebolla que hacía mi madre, el higado, el bofe. Era un plato exquisito, que a la gente le sigue gustando.

Había tres días importantes, el Esquileo (en mi casa había ovejas, y se hacían comidas especiales para los esquiladores), la Matanza y la fiesta patronal. Cuando se comía casi de todo, que no era mucho.
¿Practicabais el residuo cero antes que los políticos?
Si, a los cerdos se le daba los residuos de la casa: de comidas, las mondas de las patatas, las hojas que le quitas a los repollos. Y ahora van a ir a los contenedores marrones. Al campo le vendría bien para que no se llene de maleza, habiendo más ganado, más cerdos.
Otra de tus pasiones es la calva.?La Calva es otra de las cosas que trato de mantener. Tengo una peña en Madrid, el año pasado estuve haciendo los veranos de la villa con estos juegos tradicionales: la calva, la rana, el aro, las chapas, el chito. Estoy tratando de hacer una pequeña olimpiada en los pueblos de la Sierra, con estos juegos. Podía ir cada año a un pueblo. Sería bonito, para recuperarlo y uniría a las gentes. En Comunidad.
Es difícil poner de acuerdo a los ayuntamientos, pero no hay mucha gente que les guste el pueblo. El alcalde de mi pueblo, Felix, igual que me ha apoyado con mi propuesta de la matanza, me apoyaría en esto.
El problema de la carretera
Las Navas tenía una carretera que nos unía con Lozoyuela, pero por unos intereses particulares, se hizo calle. Son casi dos kilómetros, que el ayuntamiento no puede arreglar porque es muy costoso. Quien lo hizo calle no pensó en las Navas. Revertir la situación es casí imposible. Es peligroso porque es estrecha, con muchas curvas y con algún problema de asfaltado, pero hay presupuesto municipal que lo pueda afrontar. Piensa que es la calle más larga de toda la Sierra, yo creo que salvo Madrid capital, no hay ningún municipio con una calle tan larga.
Habría que arreglar la salida también a Mangiron o al Villar. Toda la vida ha habido un camino, que la gente que venía de la Jara, pasaba por Navas de Buitrago, por eso tenemos el paso del fielato, la gente que pasaba por él tenía que pagar un impuesto.
¿Qué recomiendas de tu pueblo?
Navas tiene un aire maravillo, buenas rutas, es una zona de piedras, con buenas vistas. Tenemos unas cortes muy originales donde se metían los cerdos. Nuestra Iglesia es románica, tiene una pila románica bautismal donde yo fue bautizado. La tranquilidad a 60 kilómetros. Los niños pueden pasear tranquilamente.