La Dirección General de Carreteras e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid inició en septiembre pasado obras en la M-127, que une El Berrueco con Cervera de Buitrago. Las obras están en el punto kilométrico 10,500, sobre el arroyo de la Alameda. El vicepresidente
Por ello se estableció el CORTE TOTAL de dicha carretera entre el Punto Kilométrico 5,00 a la salida de El Berrueco y el punto Kilométrico 12,00 intersección con la M-126 desde el lunes 3 de Septiembre y por un plazo aproximado de 4 meses. En las últimas semanas a Senda Norte, han llegado quejas por la paralización de las obras, ya que apenas se ven avances ni trabajadores.
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Los vecinos de los pueblos afectados, de Cervera de Buitrago, de El Berrueco, se quejan de la lentitud de las obras. Y como en días laborables, y con buen tiempo, cuando se acercan a dicho punto apenas ven a un par de trabajadores, si los ven.
Este Corte obliga a un desvío para comunicarse entre estos pueblos que incrementa el tiempo de comunicación en más de media hora, perjudicando los transportes comerciales, sanitarios y a los colegios e institutos.
El 11 de enero, durante su visita a Cervera de Buitrago, el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Pedro Rollán (su departamento no es responsable de Carreteras), reconoció el retraso. Rollán señaló que «son una obras de estabilización y hemos de tener en cuenta la climatología adversa de la zona. Somos conscientes de que está superando el tiempo de finalización previsto. En los próximo días se podrá efectuar una valoración más pormenorizada sobre el horizonte de finalización. Lo que queremos es dejar la carretera en la mejor condición posible».
Las lluvias de otoño retrasaron la obra según la Consejería de Transportes, sin embargo, llevábamos más de un mes sin apenas lluvia.
Otra de las causas, que se han aducido desde otras fuentes, es la falta de arena para compactar con seguridad antes de echar el asfalto. La tierra de la zona no se compactaba adecuadamente. Lo que afectaba al presupuesto previsto.
Además, la empresa adjudicataria, podría estar en suspensión de pagos lo que retrasaría aún más, de confirmarse, la finalización de las obras; ya que habría que resolver el contrato para volver a adjudicarlo.
Las fotos que acompañan a este artículo están tomadas el 11 de enero, sobre las 12.00 de la mañana; como se puede ver no hay nadie en las obras, y se puede andar con tranquilidad por el interior de la estructura de hormigón.