D. Linares
A lo largo de los últimos años los autogestores de Madrid hemos pedido que las personas de apoyo que hacen de acompañantes de una o varias personas con discapacidad intelectual no tengan que pagar la entrada en cines, teatros, museos, polideportivos, etc. La persona de apoyo, como su nombre indica, está trabajando dando apoyos para que las personas con discapacidad intelectual puedan ir al cine o hacer cualquier actividad de ocio.
Hace ya unos meses los políticos nos prometieron que iban tomar medidas para que estas actividades fueran gratuitas para las personas de apoyo y nos pusimos muy contentos. Hace unos días nos informaron de que la medida que se ha tomado afecta solo a los acompañantes de personas con discapacidad física, quedándonos fuera las personas con discapacidad intelectual.
Estamos de acuerdo en que las personas de apoyo que trabajan con personas con discapacidad física no paguen entrada y que las barreras arquitectónicas hay que tenerlas en cuenta. Pero no son las únicas barreras que existen. Cuando la información no es accesible a algunas personas como a las personas con discapacidad intelectual nos cuesta saber cuánto cuesta el cine, cuánto me tienen que devolver, es difícil manejarnos en transporte público a la hora de saber en qué parada tengo que bajar o dónde hacer transbordo, entender la carta de un restaurante, hacer una reserva online… Estas son las barreras cognitivas, invisibles para mucha gente, pero que están ahí.
Por eso pedimos que igual que las personas de apoyo de personas con discapacidad física no paguen entrada, los apoyos de personas con discapacidad intelectual tampoco lo hagan. Sin nuestros apoyos no podríamos acceder a cines, teatros, museos, polideportivos… y es injusto que tengamos que pagar nuestra entrada más la de nuestro apoyo. Por eso pedimos que se tomen las medidas oportunas para que se deje de dar esta discriminación hacia las personas con discapacidad intelectual y que puedan tener el mismo acceso a actividades de ocio y culturales que el resto de la sociedad.