Juan A. Atienza

“El cierre de dos escuelas infantiles deja a 300 niños sin plaza y a trabajadoras sin cobrar”.

Nuestra presidenta se queja de todos los desaguisados que hace el señor Sánchez, de las tropelías contra los madrileños, según su delirante opinión. 

Sin embargo, no he visto ningún comunicado, ningún tuit, ninguna manifestación pública de ella y de sus palmeros ante el hecho de que se tenga que cerrar dos escuelas infantiles de titularidad pública, aunque de gestión privada, no por la falta de niños, sino porque la empresa concesionaria, elegida por la Comunidad de Madrid de Ayuso, no paga a los trabajadores.

Unas escuelas que son públicas, y por tanto es responsabilidad de la señora Ayuso de garantizar que se presta ese servicio y que a los trabajadores se les pague. 

El dinero que dio la Comunidad donde esta.

La señora Ayuso no se indigna por esto, se calla, y mira lejos para desviar de su gestión y de su responsabilidad.

Esos niños se les asignará otros centros, mientras esos edificios se quedan vacíos.

Pero no hay problema, es una Comunidad de libertad, donde se le perdona impuestos a los ricos que no aportan ni riqueza ni empleo a los madrileños.