La Asociación la Jara de Robledillo, volvió el 18 de febrero a sacar paracorrer por las calles las tradicionales Vaquillas, las cuales corrían y embestían a todo aquel que se encontraban en su camino hasta que «se las dio muerte» de forma simbólica como por costumbre se hace, con el objetivo de acabar bebiendo su sangre en forma de sangría y caldo caliente. Un día muy divertido, pues la mayoría de los vecinos  y vecinas “nos disfrazamos de abejas, superhéroes, robles y jaras etc. aprovechando que coincidía con el día de Carnaval”. 

Como no podía ser de otra forma, el sábado posterior celebramos el Entierro de la Sardina, donde nos volvimos a disfrazar, aunque esta vez de viudas, monjes y obispos, para llevar en un cortejo fúnebre a la Sardina por las calles del pueblo hasta una gran hoguera donde la quemamos y lloramos su muerte, todo dentro de un ambiente burlesco y festivo. Estos carnavales han sido, aún si cabe, más especiales que los de otros años puesto que hemos vuelto a celebrarlos después de tres años de parón por la situación sanitaria y hemos demostrado que entre todos los vecinos y vecinas seguimos disfrutando de las tradiciones que con tanto cariño nos han legado nuestros antepasados.