Bustarviejo acoge este proyecto en el que están implicadas personas de 0 a 80 años. El espacio contará con 17 casas y un espacio común con diferentes servicios. También contará con zonas externas naturalizadas. 

“Como en la naturaleza, una mayor diversidad nos hace más fuertes, más resilientes”. El colectivo que ha puesto en marcha el primer cohousing intergeneracional y ecosostenible de la Comunidad de Madrid en Bustarviejo tiene claro que la respuesta a los enormes retos que enfrentamos en la actualidad pasa por una vuelta a la naturaleza y a los modos de vida de las familias de antes -entendiendo ahora la familia como un concepto mucho más amplio-. Apuestan por la autogestión y una convivencia intergeneracional de cuidados mutuos; lo que salva los problemas de otros modelos similares en los que solo conviven personas mayores que se encuentran al mismo tiempo en situación de dependencia.  

Mucho más que compartir un espacio: una vuelta a la esencia humana 

Ante los nuevos desafíos ambientales, el proyecto apuesta por un diseño arquitectónico basado en propuestas ecológicas y sostenibles: placas solares, casas bien aisladas, utilización de materiales naturales, diseño bioclimático o recuperación de agua.  

Más allá de la construcción, defienden un concepto integral que defiende la protección del entorno. Para ello, cuentan con ambientólogos y personas expertas en recuperación de espacios degradados. Entre las medidas que se realizarán está la de ubicar nidales de aves migratorias, refugios de murciélagos, hoteles de insectos, zonas de reproducción de anfibios, pastos mediterráneos, eliminación de especies invasoras y hasta un paseo fluvial público. “Vamos a crear un ecosistema que permita la vida a todos los seres vivos del entorno y no solo a una única especie, el ser humano”, afirman. Crean, de este modo, un concepto novedoso que armoniza los valores del cohousing, los cuidados intergeneracionales y la protección ambiental.  

Un modelo social frente a la especulación 

El colectivo, formado por 30 personas, se constituye en cooperativa bajo el nombre “Villa Armonía”. Forman parte del mercado social y su modelo se basa en la propiedad colectiva bajo cesión de uso. Un modelo que impide la especulación puesto que su precio no se verá afectado por las fluctuaciones del mercado.  

El proyecto se encuentra en fase de aprobación; el equipo de arquitectura presentó los documentos necesarios para conseguir licencia de construcción por parte del Ayuntamiento. La puesta en marcha de esta iniciativa en Bustarviejo servirá de referencia para otros lugares de la Comunidad y del Estado español.