José Béjar- Rascafría

Hemos acabado un desastroso año y, optimistas por naturalezaB, pensamos que por muy mal que venga este 2021 no podrá agravarse más. Que la teoría de  Murphy no se cumpla y que alguien nos proteja. Dios lo hará para los creyentes y no sé quien para los agnósticos; que se lo pregunten a Darwin o a ese, su primer ancestro. Debo ser bastante cortito, a ninguno de las dos, en profundidad, los he entendido nunca.

Bueno nos movíamos por la teoría de ese hombre “tan optimista” que venía a decir que todo lo malo es susceptible de poder empeorar. Pues, sin que sirva de precedente, para este año que ha comenzado estoy bastante de acuerdo con él.

Dejando aparte la dichosa pandemia, que es de suponer, una vez vacunados, nos haremos con ella.  Tenemos por delante las secuelas psíquicas y consecuencias económicas sobrevenidas por tal motivo.

Es el momento de los psicólogos, psiquiatras, de las organizaciones empresariales, de los sindicatos (dirigentes sindicales, hay que currar un poquito más, que os va en el sueldo) y especialistas, incluido el departamento de interior, que tendrán que intervenir en toda la deriva que esto nos ha supuesto. Ahora toca parar a la calle y organizar la recomposición de nuestro tejido industrial y comercial. 

Empezamos de fiesta; así lo considera nuestro gobierno quinti-sexti- o lo que sea-partito, “cuajado a base de posturas tan afines como modelos semejantes” y dispuesto a repartir solidariamente ese premio de lotería que dice la ministra que nos ha tocado. Y dice verdad, Europa ha cumplido, ahora espera de nosotros una respuesta acorde con la confianza dada.

Llevábamos una buena parte del gordo; hemos manoseado el billete, pero todavía no lo hemos cobrado y ya tenemos asignado y mucho desembolsado anticipadamente. Algo de ello tocaba y  bien gastado me parece.  

Pero de ilusiones y migajas no se vive y me parece que vamos a necesitar este último presupuesto, harto-multimillonario, tres años más para salir de esta.

Ahora viene cómo se administra y distribuye, y ahí entran en escena unos partidos que llevan en su A.D.N el despilfarro y el descontrol, quiero pensar que por desconocimiento. Se necesitan gestores de la privada y no pipiolos y carcamales que han vivido siempre del cuento de los partidos, del sueldo público garantizado y que han dormido siempre a pata suelta sin que les preocupe el levantar el cierre y de dónde saldrá al día siguiente la pasta para pagar a su gente. 

Como primera ocurrencia tenemos la subida a los funcionarios, pensionistas y miembros del gobierno. Ahora, prometido esto, no tenemos dinero para los Ertes, subir el salario base  y el ingreso mínimo vital; ni podemos garantizar una vivienda a las personas más vulnerables (nos desentendernos de ello y cargamos el mochuelo a los arrendadores particulares). Estáis alentando la okupación y los altercados públicos que conlleva (especialidad de Podemos y sus mareantes mareas). Seguimos aumentando las colas del hambre, que ya empiezan en Finisterre y llegan al cabo de Gata, y tiramos unos cuantos más cada día a dormir entre cartones a los portales de cualquier edificio. Y esto lo hace un gobierno social-comunista, con una ministra de igual-da, otro de bien-estoy  y veintidós ministerios, de los cuales la mitad disfrutan de vacaciones permanentes y ni están ni se les espera. Todo un sinsentido. 

Igualdad en los sueldos públicos, no es igual-da y esto es lo que habéis hecho. Subir un 0,9 todas las pensiones. Todos los sueldos de funcionarios. Todos los sueldos del gobierno. Subir 63 euros al año una pensión de 500 euros/mes y 252 euros una de 2000, esto es igual-da.  Pagar 756 euros más al año a un miembro del gobierno y 63 a un pensionista? Igual-da es aumentar cada día más la brecha entre el salario mínimo y los sueldos de los altos cargos públicos? Pero no os da vergüenza?  Lo entiende el más bobo de la clase. Si se aplica un porcentaje igual para todos, los ricos serán cada vez más pudientes y los pobres …….pues eso. Esto lo entendéis hasta vosotros, diputados cansinos y cansados. Cuatro trabajáis y 361 os coméis la sopa boba.

Esto es lo que le importa al currante y al currado.  D. Pablo y D. Pedro(hay que cambiar el orden, que aquí si altera el producto) Centraros en la gran crisis que viene arrasadora, dejar a los jueces el caso del Emérito, a nuestra Ayuso con su Madrid y sus hospitales y dejarse en paz de debates y chorradas que ahora no vienen a cuento; me refiero a “republicanadas”, independencias y otras gilipolleces; ya habrá tiempo de abordarlas. Eso sí, dejar un poco de libertad a los medios que controláis. Las doctrinas que queréis implantarnos ya no cuelan y vuestros acólitos, directores de programas y tertulianos bien pagados, están haciendo el ridi.

No me pillas. Soy republicano convencido.