Luis Fco. Durán Carretero 

Pues eso. Resulta que con la pandemia de las narices. Si, debe de ser la única que se trasmite cuando respiras, de hecho una ministra de sanidad boliviana, dejo claro este asunto. Solo se transmite si  respiras… ¡Grandioso!

Pues ahora resulta que también y además, nos estamos quedando mancos y porqué, porqué, porqué…eh…

Porque si observamos los nuevos comportamientos del personal, parece que para algunas cosas no tenemos manos…unos “esmanotaos” que se dice…bueno para mangar todavía hacen falta, para ser un ladrón en toda regla no tanto. Con saber manejar datos y llamada por voz solucionado.

A lo que iba, que me estoy desviando del asunto. No tengo ninguna otra desviación. Lo digo por si hay algún goloso…

Cada vez que veo a alguien atravesar una puerta sin tocarla o haciendo contorsiones extrañas para ello. Todo por no utilizar las manos para tocar la puerta o coger el picaporte o pomo y abrirla como toda la puñetera vida. Pues no. Ahora no. Ahora la mayoría de la gente busca formas extrañas para que se abra la puerta por sugestión, porque sí o porque mandando unas plegarias a Moisés abra la puerta como en el Mar Rojo, con bastón y con el poder de Dios…esto sí que sería la Hostia… 

Bueno, `pues visto lo visto la Hostia es la que nos vamos a dar. Otra, por cierto. Y todo esto por un montón de ineptos. Por un montón de idiotas. Todo esto porque donde no hay cerebro, solo bolsillo, pues…pasa, lo que pasa…

“Macuerdo yo” cuando esto era toros y furbol para distraer al personal y que no tuviéramos tiempo de pensar. Que es lo mismo que está pasando una cosa. Una cosita, yo en esos años me tocaban la pera estas incertidumbres…y, por cierto en  esos años empezaba a saber, que había unas peras que tocar, también dependiendo de quién y, de qué le pareciera bien…para el bien de todo y de todas las partes implicadas. Esas cosas, ¿De quién son las peras? .¿Por qué has tocado esas peras?

Bueno pues los mancos de ahora o “esmanotaos” están llegando a todos los lados y a un ritmo inesperado. A un ritmo inesperado porque no tenemos costumbre de que la gente que nos rodea no utilice las manos.

Las manos es el mejor invento para relacionarse. Quieres mostrar cariño, das un abrazo.  Quieres mostrar indiferencia. Ni le miras, no hacen falta las manos…

Quieres mostrar odio, mala leche o similares. Pones los dedos donde quieras, en uve de cuernos,… con el corazón inhiesto como si fuera un pararrayos… Es que manda narices, ahora que todo el mundo lleva las manos más limpias que el jaspe, no las utilizan por miedo a contagiarse ¿A contagiarse? Pero si después de cada puerta hay un desinfectante, todos o prácticamente todos llevamos en los bolsillos un frasquito con él. En la vida el personal ha estado tan poco propenso a contagiarse por tocar una puerta, pero…

Bueno, pues todas estas cosas sirven para que expresemos sensaciones u otras virtudes con las manos y, por supuesto con los brazos, que son la prolongación de estas o al revés…     

 Bien y, ya acabando. Vamos o no a utilizar los brazos y las manos para abrir puertas, para comunicarnos. Para ser personas, para ser mejores, para ser lo que queramos ser, pero siempre  o para dejar de serlo a hostias, pero con las manos….

Si no es así, que pena de sociedad, todos calvos …eso estaba previsto  y “esmanotaos” con las manos bien limpias y relucientes…pa ná…