El pasado fin de semana, la pequeña ermita de la Virgen de la Soledad ubicada en la dehesa de Lozoyuela sufrió el vandalismo de algunos jóvenes que hicieron botellón dentro del recinto, ensuciándolo, dejando los restos de las botellas, de la fiesta y una pequeña hoguera, además de destrozar los ornamentos con que los vecinos honran a su patrona.

Aunque la imagen de la Virgen se custodia habitualmente en la ermita de su nombre en Lozoyuela, este pequeño recinto, promovido y edificado por suscripción popular de la Hermandad de la Virgen de la Soledad, se creó para acoger la figura de la patrona mientras se honra en este enclave en la tradicional romería anual de septiembre, dentro del programa de fiestas patronales de Lozoyuela.

Durante el resto del año, es un espacio de oración y silencio en la paz de la dehesa, donde los vecinos y caminantes pueden hacer un alto y sentarse y contemplar la imagen de la Virgen, mostrarle su respeto, formular sus preces o simplemente descansar tras hacer alguna ruta. Por tal motivo, es un recinto siempre abierto y acogedor, que ofrece abrigo en invierno y sombra en verano a los visitantes.

Y, sin embargo, el incivismo y escaso respeto de algunas personas les hace creer que pueden convertirlo en un lugar propio para su diversión y esparcimiento mal entendidos, como los actos del pasado fin de semana, denunciados por la Hermandad.

Pero, además, desde el 15 de junio, la Comunidad de Madrid se encuentra en temporada de máximo riesgo por incendios forestales, por lo que está prohibida la realización de cualquier fuego en espacios naturales, zonas forestales o de alto riesgo, como es el caso, por el peligro máximo que ello entraña.

Los problemas de vandalismo no son un hecho aislado en Lozoyuela Navas Sieteiglesias; de hecho, en los últimos días, no solo la ermita de la dehesa, sino también las marquesinas de los autobuses, la pista de pádel o los aledaños al polideportivo municipal han sufrido roturas de cristales y otros elementos del mobiliario urbano, micciones en espacios públicos, además de toda la suciedad incontrolada que dejan a su paso. Por tal motivo, en los presupuestos de este ejercicio se aprobó una partida para la implantación de un sistema de videovigilancia que todavía no ha podido implantarse debido al pasado estado de alarma que a todos nos confinó.

El Ayuntamiento de Lozoyuela Navas Sieteiglesias solicita la colaboración ciudadana para identificar a los responsables de estas acciones vandálicas que tanta inquietud y malestar provocan, y además hace un llamamiento específico a estos jóvenes y adolescentes y les recuerda que estamos viviendo un momento excepcional donde todos debemos ser muy cuidadosos y precavidos en nuestras relaciones sociales para no generar nuevos focos COVID-19.

Estadísticamente se ha comprobado que el botellón es una práctica insana que provoca ruido, suciedad, actos de vandalismo en general, y contribuye a adelantar la edad de inicio en el consumo de alcohol de los más jóvenes; en este momento, además, es origen de contagios de coronavirus.