La Plataforma por el Ferrocarril Directo Madrid-Burgos está indignada tras conocer que los Presupuestos Generales del Estado para 2018 no contemplan ninguna partida para el ferrocarril directo Madrid-Burgos. «Jamás unos presupuestos generales habían sido tan poco justos con los 180.000 afectados por esta línea ferroviaria», ha manifestado su presidente, Jorge Núñez.
La Plataforma lamenta que no se vea ningún movimiento desde el Estado que aporte una luz de esperanza a esta infraestructura que ya existía y se cerró arbitrariamente hace siete años, hipotecando el futuro de los territorios por los que pasaba.
Después de tantos años trabajando y reivindicando, manteniendo continuas reuniones con políticos, organismos públicos, privados, empresarios, aportando datos y argumentos, pero sobre todo después de los esfuerzos realizados a lo largo de 2017 y estos primeros meses de 2018 y la existencia de un estudio que prueba la viabilidad de la línea, la plataforma no entiende por qué los políticos dan la espalda continuamente a este proyecto.
«No reactivar el Directo supone empresas que tardarán en llegar, opciones de transporte de personas y mercancías que también deben esperar, supone la marcha de los jóvenes, lastrar el futuro de muchas familias. El Corredor Central, la comunicación con Madrid, el turismo, las políticas europeas del transporte, la accesibilidad, la vertebración, los turistas que no pueden venir y los proyectos que no se van a desarrollar, todo eso se pospone un año más», añade Jorge Núñez.
Hartos de comprobar que el Ministerio de Fomento sí tiene luz verde a continuas inversiones para el AVE, la Plataforma en Defensa del Ferrocarril Directo no sólo no se plantea rendirse, sino continuar con las acciones de protesta y reivindicación, y de hecho está empezando a trabajar en organizar este año una movilización seria, fuerte y conjunta en Madrid, que aumente la visibilidad hacia esta reivindicación y la presión al ministerio.
«Ocho años sin trenes y siete sin línea nos parece una vergüenza bajo la que no se puede esconder ningún responsable», insiste Núñez, recordando que la infraestructura cuenta con el apoyo del sector empresarial del País Vasco, por lo que lamenta que el principal partido de esa comunidad autónoma, el PNV, esté jugando con el artículo 155. «Aquí sólo interesa la política, no la realidad social», asevera.