El tres de febrero los vecinos de Redueña pudieron disfrutar de una tarde de teatro de manos de la Compañía Lalumbre, que representó la obra: Dostoievski en tres cuentos (bajo la dirección de Diana Manrique de Antonio).
Las tres obra elegidas del escritor ruso del siglo XIX, fueron: El cocodrilo, localizado dentro de la obra Crimen y castigo (1866), El sueño de un hombre ridículo (1877) y La mujer de otro hombre y su marido debajo de la cama (1848).
Tres obras donde el autor hace uso de un humor sutil, profundo y casi surrealista.
El primer cuento: «E cocodrilo», cuenta la historia de una funcionario (Iván Matvéich) que es tragado por un cocodrilo. El funcionario se queda a vivir dentro del animal. A raíz de ese momento el desarrolla la esperpéntica y delirante historia, donde la mujer quiere pedir el divorcio, el dueño del cocodrilo hace negocio de la situación y el amigo del funcionario, que a su vez es el narrador de la historia (Semión Semiónych), intenta poner sentido común a la situación, sin lograrlo.
Esta primera parte de la historia, se desarrolla en distintos niveles de comprensión. Por un lado estría la fábula en clave humorística sobre la estupidez humana, el egoísmo. A la vez que hace un reflejo de la sociedad consumista y el capitalismo del siglo XX cuando hace mención al «principio económico» como solución a cualquier mal o situación inesperada.
La segunda obra fue El sueño de un hombre ridículo (relato corto que escribió en 1877), la representación de la soledad de un hombre y sus reflexiones internas sobre el sentido de su existencia a partir de una visión espiritual. Antes de suicidardarse le coge la mano una niña, que le hace replantearse algunas ideas sobre su suicidio, a lo que se suma un sueño revelador de esa misma noche, en la siente la muerte y acto seguido llega hasta la estrella que le ha invitado a tomar la decisión de acabar con su vida; hasta llegar a un lugar donde la felicidad es infinita. Una idea de felicidad, y la utopía, basadas en religión cristiana, contraria al racionalismo y al nihilismo (nihilismo negativo). Es una felicidad perdida, por la que hombres sienten una remota nostalgia, puede recuperarse si, se sigue un modelo de conducta basado en el amor al prójimo y a la vida.
Por último, La mujer de otro hombre y su marido debajo de la cama (1848), una historia divertida en la que un marido celoso se pasa originando malentendidos a causa de su mal, llegando a situaciones límite de la confusión y el bochorno,
Tres obras en una sola, que hicieron pasar una tarde entretenida a los asistentes.