desde PEÑALABRA
José de Villamisar.

Se dice que cada país tiene los políticos que se merece, pero yo me resisto a creer que los españoles nos merezcamos una «cuadrilla» de políticos como los que tenemos.
Desde la izquierda hasta la derecha pasando por el centro, llevan cerca de un año «chuleándonos» y lo que nos queda todavía que aguantar.
El Presidente del Gobierno en funciones y candidato a formar el próximo gobierno, acaba por fin de poner fecha para debatir su investidura en el Congreso de los Diputados. No cuenta, según todos los indicios, con los apoyos suficientes para salir airoso de semejante envite, y se anuncian ya unas nuevas elecciones para el 25 de diciembre, día de Navidad, ¡que barbaridad!.
Como se sabe, la palabra de un político, vale muy poco, o casi nada y la cambian a tenor de las circunstancias, vaya unos ejemplos: hasta hace muy poco los imputados por corrupción eran unos ejemplares señores a los que los jueces perseguían sin piedad y no se podían condenar tan ligeramente a tan anegados servidores. Crear una comisión de investigación parlamentaria para investigar a Bárcenas y al partido popular era casi una herejía. La ley electoral no era necesario modificarla, puesto que era inmejorable. Poner fin a los indultos por corrupción tampoco era necesario.
Todo esto y mucho más era lo que argumentaban los políticos del Partido Popular, hasta que una reunión entre Rajoy y Rivera hizo que cambiase todo, y donde dice digo digo….
Así ahora se acabó con la frase tan usada hasta hace muy poco de «hay que respetar la presunción de inocencia», y según dice el portavoz de los populares en el Congreso tendrán que apartar del partido a todo aquel que sea imputado, desde un miembro del gobierno a un concejal del último pueblo. ¡Madre mía, que limpieza!. ¿cuantos se quedarían?.
Los políticos aforados, tendrán que comparecer ante cualquier juez de pueblo, «pues todos somos iguales ante la ley».
También se reformará la ley electoral, para que los ciudadanos podamos elegir a nuestros representantes.
Se acabará con los indultos a los condenados por corrupción política. ¡que pena que no se hubiese hecho esto antes!. No habría tanto chorizo suelto.
A partir de ahora, el Presidente del Gobierno solo podrá serlo ocho años o dos mandatos. Esto debía extenderse a todo caro público, pues como todos sabemos hay alcaldes que llevan en el cargo desde que se murió Franco, y algunos desde antes, y Diputados que lo son desde las primeras elecciones generales.
También vamos a saber, ¡que iluso!, todo lo de Bárcenas y el Partido Popular.
Todo esto lo firmó el partido popular y ciudadanos. Rajoy, firmó todo esto porque sabe que no va a ser investido y por lo tanto no va a tener ocasión de desdecirse, al mismo tiempo, también sabe que para llevar a buen término el acuerdo o parte de él es imprescindible la firma o el apoyo del Partido Socialista y Pedro dice: No es No.
Pedro Sánchez y sus barones están metiendo al partido en la parálisis más absoluta. El Secretario General, mantiene todavía la esperanza de convertirse en Presidente del Gobierno, desde Podemos filtran la noticia de que mantienen conversaciones con los socialistas a tal fin, y desde Ferraz lo desmienten categóricamente. Desde Génova dicen que Sánchez no les coge el teléfono, mientras éstos dicen lo contrario. ¿A qué jugamos señores?. Lo dicho, se están riendo de nosotros, o lo que es lo mismo nos están «chuleando».
Y, ahora vamos a bromear un poco, y le contesto a D. Luís Fco. Durán Carretero: Yo, como Vd., también soy de pueblo, y todos los de pueblo sabemos aquello de vete a……allí a detrás del árbol, y también sabemos que un árbol, como los políticos, tiene cuatro caras, la trasera, la delantera y dos laterales, dígame Vd., cual es la parte delantera y yo le diré cual es la trasera. Saludos cordiales, Sr. Durán.