El 27 de junio, en uno de los días más calurosos de junio, se desarrolló en Navarredonda la tercera fiesta de la Retama. Una iniciativa popular creada por los vecinos para visibilizar la música y la cultura del municipio; además de servir como punto de encuentro entre los vecinos de todo el año, los de fin de semana y los que decidieron pasar una jornada festiva de música y baile en esta localidad. {phocagallery view=category|categoryid=505|limitstart=0|limitcount=0}
Este año de nuevo, la Escuela de Músicas Populares Entresierras celebró su audición de fin de curso, presentando actuaciones de sus alumnos de rabel, zanfona, dulzaina, gaita serrana, acordeón, gaita de fol, percusión y baile. Un momento de reunión entre los que no suelen verse a lo largo del año, y pasar la prueba de fuego, ante un publico atento, pero entregado.
También actuaron otras agrupaciones de la Sierra como la Trocha y la Rondalla de Rascafría, la Rondalla de La Vereda de Navarredonda, Repiques Serranos o el grupo del Henares Pliego de Cordel. Aunque las jotas que más pasiones sacaron fueron las cantadas por los abuelos de Navarredonda.. Y el poeta Pablo Villa, sirvió como improvisado maestro de ceremonias para darle un toque de palabras certeras a la bienvenida y presentación del evento.
La artesanía, una buena caldereta, y el olor a la retama y a tomillo que impregna desde primera hora las plaza de Navarredonda. Los visitantes que colaboraban comprando un sombrero recibían un tejo y una retama para que la plantarán por las tierras de la sierra.
Esta iniciativa, que no cuenta con ayudas de la administración, se construye desde el cariño para hacer pueblo y presenta unas expectativas de duración en el tiempo, porque responde a necesidades básicas de los vecinos y vecinas del pueblo: comer y beber, cantar y bailar. Y compartir.