El aula de Agroecologia tiene este trimestre dos áreas principales de trabajo. La de huerto comunitario tiene lugar en Pedrezuela. Su objetivo es aprender a cultivar las especies (en general autóctonas del área mediterránea) que mejor resisten el invierno, de ciclo más largo y que se recogen antes de la llegada del siguiente verano. Es el caso de las crucíferas de invierno, las habas, los ajos y las cebollas, o entre las foráneas la patata temprana que se siembra entre marzo y abril. Se trata de un huerto que se inicia en septiembre, muy diferente al típico de verano dominado por las especies llegadas desde América a partir del siglo XVI (tomate, calabacín, judías, pimientos, maíz, etc.). El huerto de verano necesita mucha agua y tiene pocos meses de recorrido en estos climas extremos del interior peninsular. El huerto de invierno que genera una notable soberanía alimentaria tradicional ya que permite la posibilidad de disponer de: Un suministro permanente de hoja verde y vitaminas; Una reserva de hidratos de carbono y proteínas en forma de habas secas; Una reserva de calorías en forma de patatas y que supusieron a partir de principios siglo XIX una de las claves de las revoluciones con las que se inició y consolido la edad contemporánea.

Otra de las áreas de trabajo agroecológico se dirige al potencial de las pequeñas iniciativas ganaderas (menos de 5 vacas) que aprovechen los abundantes montes y pastos del territorio, se centren en suministrar en venta directa a los grupos de consumo del territorio o de Madrid capital. Consideramos que habría consumidores interesados y territorio disponible para sacar adelante diez iniciativas de autoempleo en pequeñas ganaderías de venta directa. La clave es formar a los consumidores y contar con una iniciativa de servicios. En este sentido la empresa San Juan Bautista de Guadalix de la Sierra ofrece a los pequeños ganaderos el servicio completo de llevar a matadero, despiece envasado al vacío y traslado refrigerado al consumidor final.
Por su parte el aula de municipalismo y participación ciudadana se centra en ofrecer un espacio de encuentro y conocimiento y análisis de buenas prácticas en gestión municipal en nuestro territorio. En concreto, en este último trimestre del año 2014 se han realizado una serie de actividades de aprendizaje colaborativo, y dinámicas para que puedan ser aplicadas por los movimientos sociales de cara a las elección municipales de 2015 en la línea de la propuesta de Municipalia-Ganemos. A lo largo del año 2014 el aula ha servido para visibilizar y difundir los casos de buenas prácticas como los presupuestos participativos de El Boalo o Bustarviejo; Las candidaturas mediante primarias entre todos las personas empadronadas; Las propuestas agroecológicas sociales y municipales como los huertos comunitarios; Y por último nuevas herramientas de desarrollo comunitario, como fondos de crédito rotatorio y las organizaciones de prosumo que vinculan a productores y consumidores como es la asociación del Realejo en Bustarviejo, o la Prosumora (c/colegios 38, La Cabrera) centro de compra en toda Sierra Norte que abre todos los viernes de 16 a 18 horas como mercadillo.
El aula de municipalismo es un punto de encuentro para que los esfuerzos de ‘gobernanza’ (buen gobierno y participación ciudadana) que han estado ensayando tímidamente desde algunos consistorios, se puedan encontrar con los esfuerzos de ‘empoderamiento’ desde los movimientos sociales.
Entre las aulas de agroecología y municipalismo, de modo conjunto, se realizó esta pasada primavera un ejercicio de recogida de propuestas para el programa de desarrollo rural de Sierra Norte 2015-2020. La finalidad del ejercicio era que el PDR regional y el de GALSINMA, teniendo en cuenta la escasez de capital financiero, entiendan la creatividad e iniciativa de los movimientos sociales y neorurales como un capital social esencial para el desarrollo de este territorio.
Una de las claves del desarrollo rural es apoyarse en fomentar iniciativas de autoconsumo, producción comunitaria y pequeña producción y consumo local o provincial. Ayudar a equipar huertos municipales o comunitarios, o pequeños establos compartidos a modo de semillero de iniciativas ganaderas, son algunas de las propuestas que entendemos deberían apoyarse desde los recursos públicos de desarrollo rural.
En 2015 está previsto iniciar una primera experiencia de intercambio de formación entre Universidades Populares, así un grupo de personas interesadas en la producción y el consumo de carne se desplazara a la Universidad Popular de Carcaboso (Cáceres) –que ocupa la vicepresidencia de la Red TERRAE de Municipios Agroecologicos- para aprender de modo practico el manejo de una muy pequeñas ganaderías (5 animales) con venta directa de la carne al consumidor final; por su parte está previsto que la UNIPOSIBLE imparta una sesión intensiva sobre dinamización y diseño participativo de un programa electoral y una candidatura vecinal para 2015 en Carcaboso.
Todavía hay un amplio camino para explorar las sinergias entre la comunidad de intercambio de La Mora, su grupo de consumo y central de compras de la PROSUMORA, la UNIPOSIBLE y otras iniciativas como la Red de Solidaridad Popular RSP y banco de alimentos. Los movimientos sociales de Sierra Norte vamos así explorando nuevas formas de organización, de intercambio y de empoderamiento para avanzar hacia la soberanía alimentaria. Porque también en nuestra Sierra, otro mundo es posible.