La Iglesia de San Pedro Ad Vincula de Redueña ya tiene sus puertas restauradas. El 8 de mayo el Director General de Patrimonio Histórico, Jaime Ignacio Muñoz, visitó los trabajos realizados acompañado de la alcaldesa Mercedes Pérez y de un numeroso grupo de vecinos. {phocagallery view=category|categoryid=379|limitstart=0|limitcount=0}
Las puertas de madera han sido restauradas por Bernardo López, que explicó el trabajo realizado, de conservación y recuperación de una obra realizada en el renacimiento, con remaches de adornos del barroco. La puerta sufría un grave deterioro tanto por el paso del tiempo, como por las inclemencias climáticas. La pintura original se perdió con el tiempo. La puerta tenía planchas metálicas que habían albergado una pequeña microfauna de insectos como escarabajos, avispas, abejas…
Las puertas han sido tratadas para evitar futuras plagas, recuperando partes y poniendo otras nuevas. Su color rojo se debe al oxido de hierro de las tierras rojas con mezcla de linaza.
La puerta tiene la singularidad de que fue mal hecha al principio, y no podía cerrar. Para ello se tuvo que hacer un cierre especial.
Los vecinos no dudaron en pedir tanto al director general como a los representantes del obispado el arreglo del pórtico renacentista muy deteriorado y la mejora del sistema de calefacción.
La iglesia es de estilo Renacentista y Barroco con restos Góticos. Edificación sencilla, de piedra caliza, construida entre los siglos XIV y XV. Tiene muros de mampostería y sillería, una nave con contrafuertes y arco triunfal de medio punto. Cubierta de bóveda barroca de canon con lunetos. Portada al lado de la Epístola de estilo renacentista, con puertas con herrajes de 1661.
En el interior se conservan algunos restos de gran antigüedad como las hornacinas con los nichos renacentistas que hay en el lado del Evangelio y de la Epístola, y una escultura románica de la Virgen con el Niño.